La avería en el diferencial del Citroën C4 ha supuesto un duro revés en las aspiraciones de Dani Sordo a la victoria en el Rallye de Montecarlo, una prueba que había iniciado rodando muy cerca del líder, su compañero de equipo y campeón del Mundo, Sebastien Loeb. Pese a todo, el cántabro se mantiene segundo, a casi un minuto de la cabeza.
La segunda jornada de este Rallye de Montecarlo, que se completó ayer con seis especiales, no hizo más que confirmar el dominio aplastante que ya apuntaron en las dos cronometradas nocturnas del jueves los Citroën. Loeb, con cinco mejores tiempos, y Sordo, con uno, se repartieron las victorias parciales.
Dominio del campeón
Loeb comenzó la segunda jornada dispuesto a poner tierra de por medio y se apuntó el mejor tiempo en dos de las tres especiales de la mañana, que se disputaron sobre unas carreteras secas y con una temperatura de siete grados. No hubo rastro ni de nieve ni hielo durante todo el día.
Sin embargo, Sordo no quería quedarse atrás y paró el crono en el segundo tramo con el mejor tiempo, plantando cara al campeón y distanciando ambos sobradamente a su más inmediato perseguidor, el piloto de Ford, Mikko Hirvonen, que después de los tres primeros tramos disputados, antes de la asistencia, ya cedía más de un minuto.
Contratiempos
Cuando todo parecía estar de cara para el de Puente San Miguel, una inesperada avería en el diferencial provocó que las prestaciones del Citroën C4 del cántabro disminuyesen considerablemente, haciendole perder un tiempo valioso y viendo como Hirvonen se acercaba peligrosamente. «No sabemos muy bien que ha pasado. Quizá hayamos roto el diferencial», explicaba Sordo a la conclusión de la etapa, además de reconocer que luchar por la victoria va a ser muy difícil. «Voy segundo y es muy complicado que mejore mi posición ya que es difícil superar siempre a Loeb. Su ritmo es excelente y muy alto y además, el tiempo perdido hoy -por ayer- es insalvable salvo que le ocurra algo a Seb», señaló. En cualquier caso, el piloto oficial de Citroën reconoció que «lo más importante es que el equipo domine la carrera y que yo consiga ir por delante de todos nuestros rivales. Es básico acabar el Montecarlo en las dos primeras posiciones, como hace un año, lo que sin duda será un gran éxito para todos».
Los Ford, a la espera
Con Grönholm retirado del Mundial, los Ford marchan a la espera de un fallo de los franceses. Su líder, Hirvonen, está afianzado en la tercera plaza, después de que su compañero Jari Matti Latvala se encuentre recuperando tiempo a marchas forzadas desde la novena plaza tras el pinchazo sufrido en el primer tramo del rallye.
Hirvonen, salvo que se reproduzcan los problemas de Sordo, tan sólo debe esperar un fallo de los Citroën, pues la tercera plaza es claramente suya. El hombre de Subaru, Chris Atkinson, es cuarto, pero cede un minuto con él, algo parecido a lo que le sucede al belga Francois Duval, que ocupa la quinta plaza a bordo del Ford Focus del equipo Stobart.
Cierran la zona de puntos Petter Solberg, que no acaba de encontrar las mejores prestaciones a su Subaru, Gigi Galli y el francés Jean Marie Cuoq con un ya veterano Peugeot 307 WRC.
Problemas en Suzuki
Los que están teniendo muchos problemas mecánicos son los dos Suzuki oficiales, que están muy lejos de los puntos. Andersson es undécimo y Gardemeister, decimocuarto. Habrá que dar un voto de confianza a este equipo recién llegado con el novedoso SX4 WRC, para ver hasta donde pueden llegar en un certamen dominado por los Citroën y los Ford
Hoy se disputará la tercera jornada de la prueba inaugural del campeonato con la disputa de seis tramos. En total serán 132,78 kilómetros contra el reloj.
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